domingo, 29 de abril de 2018

EVALUACIÓN FIANL DE "BARILOCHE LITERATURA EN TRÁNSITO"


EVALUCION FINAL de "BARILOCHE LITERATURA EN TRÁNSITO"

Los días 20 y 21 d abril de 2018, realizamos un encuentro multicultural y literario en la ciudad de San Carlos de Bariloche. Y es preciso hacer una exhaustiva evaluación de los aspectos positivos y los negativos que hubieran surgido.
Por amplio margen, los primeros han sido muchos, teniendo en cuenta el coraje de las organizadoras y la inexperiencia en eventos de esta índole.
Lo cierto es que comenzamos tímidamente allá por diciembre del 2017, barajando aspectos imprescindibles como: lugar, fecha, invitados, cronograma de actividades, difusión. A poco de comenzar, tuvimos una amplia recepción y se inscribieron más de cincuenta participantes, que ofrecían intervenir en los dos días, en ronda de lecturas, presentación de ponencias y de libros, aportes musicales, narraciones, danzas. Fue intercambio de poesía y narrativa entre Patagonia y el Litoral, donde se encontraron escritores del Neuquén, Río Negro y Chubut, con escritores invitados especialmente de la provincia de Santa Fe.
Las comunicaciones comenzaron a ser fluidas. Cuando tuvimos el plan completo, debimos detenernos en la organización, ya que no lográbamos concretar el espacio para ambos días. Como consecuencia, no era posible hacer difusión, ni el pedido de auspiciantes y/o apoyos institucionales. Dependiendo del espacio, había que considerar la cobertura de recursos tales como sonido, pantalla y cañón, distribución en el lugar, decoración, tiempos, etc.
Un sueño largamente perseguido se hizo realidad, y las letras comenzaron a andar. Los visitantes intercambiaron experiencias y aprendizajes, que es lo que se logra cuando hay nobleza, humildad y pasión en los actos. Es así como proceden los grandes. Un verdadero intercambio cultural y artístico. Recibimos auténtica colaboración hasta en los pequeños gestos de parte de los escritores y artistas en general.
Todo se desarrolló en plenitud de cordialidad y alegría, y una enriquecida entrega de creaciones escritas y narraciones orales. Debemos subrayar que el respeto por los tiempos establecidos, por parte de los disertantes, nos permitió el cumplimiento de todo el programa, sin que nadie quedara sin su participación. Así también pudimos disfrutar de música, danzas folklóricas argentinas y baile contemporáneo, lo que nos otorgó los minutos necesarios para elaborar el material literario que se iba presentando.
La violencia de género y la importancia de la lectura y de la escritura, y el placer de ambas, fueron temas destacados. Nos parecieron de suma importancia por la actualidad y la necesidad de su atención, en ambos casos.
Entre los libros presentados hubo algunas coincidencias temáticas. Los mismos tratan sobre la inmigración europea hacia nuestras tierras. Aquí rescatamos la valoración de nuestros antepasados y el enriquecimiento histórico.
No faltaron los libros para niños, que con la fantasía de duendes y hadas, acapararon la atención de los pequeños presentes.
Escritoras de Santa Fe contaron sobre sus experiencias comunitarias de escritura en aquella provincia, que nos dejaron una idea esperanzada de que comprender la importancia del leer y del escribir, nos abre horizontes.
No queremos olvidar el acompañamiento que desde tierra santafesina nos hicieron llegar dos escritores, que al no poder estar presentes, desearon darnos un abrazo, enviándonos sus textos que, “con las palabras que dicen, sorprenden, hermanan” y la valoración de que “la literatura trabajada en serio, es el único camino para desvanecer las fronteras” nos colmaron de orgullo y ganas de seguir luchando por las letras nacionales.
Con “Las Cuchicheras” de Neuquén y Las Narradoras de la Biblioteca Sarmiento, de nuestra ciudad, pudimos disfrutar en dos estilos muy diferentes para contar cuentos de autores argentinos, que nos hicieron reír y pasar el momento gratamente.
Seguramente hubo errores en nuestra experiencia de organización, pero hemos puesto toda nuestra energía.
Uno de los aspectos negativos que advertimos fue la falta de concurrencia de docentes, estudiantes y escritores locales, a pesar de la difusión realizada convenientemente.
Aprendimos que es necesario trabajar con tiempo, ya que hay que prever contingencias y tener un plan alternativo en cada situación.
El calor y acompañamiento de todos los que viajaron hasta San Carlos de Bariloche, nos impulsa para pensar en un segundo encuentro. También tomaremos muy en cuenta las consideraciones sobre la necesidad de más tiempo para la elección de los libros que estén a la venta.
Siempre serán bienvenidas las sugerencias durante el proceso de preparación, de tal modo, que sea factible corregir errores.
A continuación transcribimos algunos conceptos recibidos:
“Regreso cargada de emociones, de palabras nuevas, y deslumbrada por la calidad de algunos expositores. Salió todo muy bien”.
“Atender a minuciosos detalles para la próxima organización”.
“Agradezco a esas dos mujeres atrevidas, la oportunidad generada para que nos encontremos los escritores de la montaña, con los de la llanura, los de horizontes breves, y los de horizontes amplios”.
“Una reflexión a recuperar: Un escritor es quien mantiene una relación inquieta con la palabra, una postura cuestionadora de qué dice y cómo lo dice. Una conciencia diferente sobre el poder del lenguaje. Todo se puede con la palabra… construir y destruir, sanar y enfermar, pensar, comprender, porque la palabra es energía creadora”.
Las gestiones ante los organismos públicos e instituciones privadas deberán hacerse con la demostración de lo realizado en esta primera edición.
Los hechos consumados son la mejor promoción. Con la satisfacción del “haber hecho” nos veremos el próximo año.


Marie M

Archivos adjuntos17:47 (hace 24 minutos)
para 
FELICITACIONESSSSSSSSS DE NUEVO!!!!!!!!!! Excelente evaluación del evento!!! Más allá de los detalles a pulir para el año que viene... NO te imaginás la alegría que me da saber que lo lograste y superaste las espectativas... Queeeeee lindooooo!!!! Se abre un largo camino por recorrer con estos encuentros...
Muy biennnn!!!! Bravísimo!!!
Abrazote!!!

Marie

miércoles, 25 de abril de 2018

EL TORRERO


EL TORRERO

Desde hacía años, Antonino era “el torrero”, como lo llamaban en el pueblo.

Ser torrero era la tradición familiar, ya que su abuelo y luego su padre habían sido cuidadores y vigías en el faro del peñón en la punta de la península.

Era una familia de navegantes. Habían logrado, por experiencia, quedarse a la orilla del mar, y aunque Antonino no era Capitán, igualmente heredó la custodia del antiguo faro.

La vida en el mismo era dura y solitaria. Sus antecesores no se habían casado, ni formado familia hasta la jubilación. Esta se lograba con pocos años de servicio y a una edad muy joven, puesto que el trabajo era sacrificado, y se compensaba de esa manera.

Pero Antonino, a sabiendas de las circunstancias, había logrado hacerse de una novia, en aquel pueblo costero. La veía dos veces a la semana, unas pocas horas durante la mañana, ya que pasaba su vida en la torre del faro.

Cuando habían transcurrido varios meses de noviazgo, solicitó casarse con Adelina, para poder tenerla todo el tiempo con él.

El faro les proporcionaba una pequeña habitación, que servía de dormitorio y cocina. El baño estaba afuera. Adelina no se sentiría sola pues las tareas en su nuevo y minúsculo hogar, serían novedosas y variadas.

Limpiar, cocinar, ayudar a su marido en el mantenimiento de pintura, aprender las normas y señales en el encendido de la lámpara en el anochecer, harían sus días entretenidos.

Al principio, los francos eran tomados con rigurosa puntualidad, para volver al pueblo y visitar amigos y familias. Pero con los meses, estas licencias se fueron espaciando, y llegó el momento en que Antonino ya no quería caminar hasta el villorrio.

Un día, desconsolado, llegó a casa de sus suegros con la terrible noticia. El mar se había llevado a Adelina. Gritándoles les decía: “ella salió a pescar después del almuerzo, y el bote fue arrastrado contra los riscos, con tal fuerza que destruyó la embarcación. Y el cuerpo fue tragado por el imponente oleaje”. Antonino contó que todos sus esfuerzos habían sido inútiles para encontrar a su esposa.

La investigación inmediata no logró esclarecer la repentina desaparición de la mujer. Y el hombre no pude ser imputado, por falta de pruebas en su contra.

El sufrimiento invadió el ambiente, pero superado el dolor, Antonino comenzó a relacionarse otra vez con la gente del bar, al costado de la plaza. Y paso a paso, también a agasajar a una nueva amiga, que se convertiría en su nueva novia, y luego su nueva esposa. Todo iba normalmente, él estaba viudo y aún joven. Lo lógico era que rehiciera su vida.

Virginia empezó a frecuentar aquel solitario paraje, a la orilla del mar, sobre el gran acantilado. Sitio misterioso y romántico a la vez.
La relación se afianzaba y los planes se consolidaban. Virginia quería tener un hijo, y eso muy pronto definió que se quedara con su hombre, en ese pequeño refugio.

Y la historia parecía repetirse, aunque Virginia no lo había registrado.
Pasó la primavera y luego el verano, y las visitas al pueblo empezaron a espaciarse otra vez.
En esta oportunidad la razón era el embarazo de Virginia y el duro invierno, que sugería que mejor era quedarse en la torre, protegidos del frío y del viento. Por cierto, falso embarazo que Antonino había inventado en su última ida, solo, al vecindario, y en las charlas en el bar que sus amigos escuchaban distraídos, en cada relato.

Al noveno mes, Virginia aún no había efectuado ningún control de su preñez. La familia insistía al futuro padre sobre lo irregular de la situación, pero Antonino no daba importancia. Solo respondía que su esposa estaba bien, que no necesitaba de ningún médico.

Llegado el día del parto, Antonino corrió a casa de su madre avisando que habían tenido un accidente en la escalera que va a la lámpara, y Virginia, con el golpe, había fallecido. La justificación de la rápida sepultura, esta vez no conformó ni a parientes ni a amigos. Él solo exclamaba que lo había hecho por desesperación, que así, junto al faro la recordaría siempre.
Todos quisieron ir hasta el faro. Pero la policía cerró el camino. Había cosas por aclarar y el lugar debería permanecer intangible hasta resolverse el cúmulo de dudas.

Antonino, en esta oportunidad no pudo regresar al faro, permaneció incomunicado en el único calabozo de la comisaría.
El Jefe de Policía, acompañado del Juez de Paz como testigo, ingresó a la torre. Subieron los pocos escalones hasta la habitación. El cuadro fue macabro. El desorden reinante impedía caminar, tal vez indicios de una pelea conyugal. La falta de higiene demostraba inactividad, desidia, abandono. El tóxico y pavoroso ambiente contaminaba el aire fétido y lo hacía irrespirable. Los dudosos restos de comida alimentaban ratas y cucarachas.

Las náuseas dieron vuelta hasta los vómitos a los hombres. Todo seguía descomponiendo a los dos testigos involuntarios, que solo atinaron a cerrar nuevamente el lugar y huir por el camino de regreso. Las espeluznantes imágenes serían imborrables…

El testimonio originó la sentencia: el detenido sería trasladado y juzgado en la capital de la provincia, con cárcel perpetua por asesinato seguido de antropofagia.   
                                                 
                                                    NORMA DUS
                                               r.p.i. n° 5998345/18

EL TORRERO

PARA COMPARTIR


FIDELITY

Nació Princesa. La niña fue educada en Palacio. No asistió a colegio formal, y el Director de Eton era el preceptor particular que proveía de la instrucción y conocimientos necesarios para su vida monárquica.

Desde muy joven su sonrisa fue sepultada por un rostro sin gestos, conteniendo inalterable toda posibilidad de sentimientos expresos.

Se sabía que sería la heredera, y para eso se fue moldeando su vida, en Palacio.

Se casó con un apuesto oficial, sin familia de abolengo y con un título nobiliario comprado con fortuna y arreglos económicos. Pero ella lo amó sin pretensiones.

Luego los hijos vinieron en medio de vendavales matrimoniales y negados adulterios. Mientras, la nación instruía sus reglas. La sociedad reclamaba, y los vasallos demandaban presencia y ejemplos virtuosos.

La vida transcurría opaca, con obediencias casi normales y agobiantes. Consejos y proposiciones se imponían sobre la ignorancia conceptual de la doblegada Alteza. La falta de información hacía que la mujer Princesa luchara en función de su próximo reinado.

La muerte inoportuna de su padre, El Rey, aceleró la coronación. Era la hija mayor.

Confrontar con naciones dominadas absurdamente, colonias, fuentes de riqueza y obligaciones iban socavando las energías, aun reprimiendo dolores, y pintando bienestar y alegrías en óleos que transmitirían falsas historias. Una familia desafectada, hijos ausentes criados por institutrices, un matrimonio figurado, sumaban para endurecer la estampa de la frágil y solitaria “Alteza Real”, La Reina. Jamás una lágrima correría por aquellas mejillas apenas ruborizadas por los polvos del disimulo y la frialdad.

Pero esa mañana, el tiempo se detuvo y soltó las aguas del desconsuelo. La noticia lo pudo todo, quebró los grilletes de la compostura logrando desamarrar el llanto contenido para el mundo real. Había muerto “Fidelity”, símbolo oriental de la paciencia y la sabiduría cuando uno se encuentra bajo presión. La pequeña tortuga, mascota preferida de La Reina, apareció masticada por el Mastín, propiedad del Príncipe Consorte.

La Reina, por primera vez, lloró desconsolada.

                                                                                     NORMA DUS
                                                                                  R.P.I. n° 5400673/18

         

TIRRENO

Una danza macabra dominaba al cuerpo negro y lustroso de Ibrahima. El espacio era infinito. Su mente iba alentada, aferrándose a la búsqueda de la respuesta que oteaba en aquel horizonte de esperanza y salvación.

En ese cuerpo dolido rebotaba la energía, pero la desolación le mantenía la fiebre alta de la sangre. La carne se conmovía en la peligrosa zozobra del ardor que le daba la insolación.

No había palabras, todo era un desborde de sudor que afloraba y era barrido por el pulso agotado.

Mantenía sus labios sellados, mordiendo la desesperación, que pérfida, le hacía doler los párpados. Esos párpados que ateridos intentaban sostener la visión despierta. No había que perder el rumbo.

La distancia se iba estirando como el agua misma, que se licuaba, lenta, agresiva, insondable.

Ya la noche venía apagando los espejismos, cuando fue en un instante que el golpe lo tiró sobre las rocas playeras. Su balsa se había estrellado, brutal y el desmayo no le permitió ver que ya estaba en la costa itálica. Sus muñecas sangraban la liberación de los remos. Y el destierro y castigo de náufrago senegalés había concluido.

                                                                             NORMA DUS
                                                                           r.p.i. n° 667443/18


BARILOCHE LITERATURA EN TRÁNSITO - continuación

Entre los libros presentados hubo un tema en especial; la inmigración europea hacia nuestro país, con "Olga y Roni" de Marita Molfese, "De Bela Krajina a El Chaco", de Daniel Brunskole y "Desde la Osteria de Migai" de Norma Dus.
También hubo de poesía, y otras expresiones,
tocando asuntos como la violencia de género.


Contamos con la participación de las Narradoras de la Biblioteca Sarmiento, de S. C. de Bariloche, y Las Cuchicheras, de Neuquén.


El evento fue declarado por el Concejo Municipal de Interés Municipal, Educativo y Cultural, según Decl. n° 2374-CM-18.


Disfrutamos con la participación del grupo de danzas folclóricas IRUPÉ, el dúo de música FRACTALES y las danzas de LA COMPAÑÍA.

Al final del evento se entregaron los respectivos certificados de Participación y Mérito a cada uno de los participantes.






BARILOCHE LITERATURA EN TRÁNSITO

Los días 20 y 21 de abril de 2018 se realizó en San Carlos de Bariloche un encuentro intercultural, con escritores de Dina Huapi - Río Negro, comarca andina, valle del Río Negro y del Neuquén, San Carlos de Bariloche y como provincia invitada, escritores de Santa Fe.




Entre las actividades desarrolladas hubo
ronda de lecturas, presentación de libros,
ponencias sobre importancia de la escritura y de la lectura, y el placer de ambas, monólogos y narraciones orales.