Siguiendo con ganas de compartir, les cuento que también pude dejar parte de mi obra en el Crucero MONARCH, en el que recorrí las Antillas Holandesas.
Entre otras distracciones el crucero tiene una pequeña bibloteca en formación, a la que agregué dos de mis libros. Los mismos fueron recibidosCreo que mis donaciones fueron una forma de hacer saber sobre las letras argentinas poco difundidas de aquellos autores que no trascendemos las fronteras locales o internacionales.
Y a todos uds. que siguen mi humilde y callado camino en las letras, muchas gracias por la aceptación de lectura.
1 comentario:
Felicitaciones!!!!!me encanta lo que hiciste!!!!!
Publicar un comentario